La luna negra se derrama
en el lago negro de las sombras
y cada sombra se disuelve
en un caldo córvido
que me recuerda
que nada vuelve
y que la luz no es más
que una fantasía
más allá de los ojos
La esencia me asfixia
enciendo la luz
y la ilusión me salva.
en el lago negro de las sombras
y cada sombra se disuelve
en un caldo córvido
que me recuerda
que nada vuelve
y que la luz no es más
que una fantasía
más allá de los ojos
La esencia me asfixia
enciendo la luz
y la ilusión me salva.
3 comentarios:
¡¡Precioso!!
" que nada vuelve
y que la luz no es más
que una fantasía"
Un gran abrazo.
Un poema sólido y con imágenes muy eficaces. Inolvidable.
Un abrazo.
Abel German
Excelente poema, Andrés.
Los dos primeros versos son estremecedores
Un abrazo
Publicar un comentario