miércoles, 25 de febrero de 2015

Domesticar las palabras.

Las palabras
huelen
suenan
perfuman o apestan
cantan o rugen
vivifican o matan
flores o dagas
las palabras
son siempre
algo más

Hay que saber
domesticarlas
o
callar.
 

1 comentario:

Abel German dijo...

Sí, Andrés, en eso consiste el arte poético. El texto mismo es un buen ejemplo.

Calavera.

Casa que atesora la oquedad dejada por el único que la habitó y tuvo en ella la irrepetible cita con el unive...