martes, 31 de marzo de 2015

Mi empeño.

Mi empeño era
sobrevolar tu autoestima
adentrarme en ella
como un acto de tu voluntad
hacer sencillo que me quisieras
no como algo que llega
sino
germinación
y lujuriosa inflorescencia
nada más.

 

3 comentarios:

Abel German dijo...

Ése es el empeño de todo amor verdadero, solo que a veces no se sabe definir. Tú lo has hecho de la mejor manera posible, y eso se agradece.
Un abrazo.

Anónimo dijo...

Aunque a veces quede sólo en ganas, en deseo ardiente...

Ceciely dijo...

El empeño vence o muere en el camino...
Te deseo una lujuriosa inflorescencia en esta Primavera.
Saludos.

Calavera.

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