Un día
cierto día
de todos los días de la vida
el sabor del tiempo nos empalaga
y una arcada inútil
nos saca de las entrañas
los segundos mal digeridos
de tantos y tantos minutos
de tantas y tantas horas
de ese único día
El último.
Blog de poesía y aproximaciones. Todo es posible en el territorio del asombro. Balbuceos de criatura encomillada por infinitos desde su soledad compartida.
Casa que atesora la oquedad dejada por el único que la habitó y tuvo en ella la irrepetible cita con el unive...
8 comentarios:
De nuevo haces un tratamiento novedoso de un tema que, como el tiempo y la muerte, forma parte de los grandes tópicos (y obsesiones) humanos. Y lo haces, como otras veces, con una economía de recursos asombrosa. Apenas once cortos versos te bastan para trasmitir el impacto de ese complejo, amargo y misterioso instante final.
Para ser "un poeta cansado" lo haces muy, pero muy, bien. Queda grabado como una herida, corta y profunda, ese último momento en el cual todos los momentos pasan su cuenta de cobro, como un relámpago fatal e imposible de detener. Estupenda condensación Andrés, me ha fascinado. Un abrazo te dejo.
Pues bendito sea, si se pasa el dia cuanto antes, ja, ja, ja.
Un saludo
El último día, creo que todos hemos pensado más de una vez en ese respiro final, tienes la habilidad de resumir en unos contados versos, esa fuerte carga emocional.
Un abrazo.
Ese último día, es lo único real que sabemos que llegará,
sin dudarlo,
sin saber cuando...
pero sabiendo que llegara sin remedio alguno...
Y así, con la digestión, por fin, bien hecha, podemos descansar en paz.
Un saludo.
Paso con agrado por tu espacio. Abrazos.
Wow, me has dejado sin palabras, muy bonito post. Ese final del único día, me impactó. Gracias por compartir.
Un abrazo,
Andri
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