Huele
tu mirada
en ese lugar de hojas muertas
alfombras en los senderos del viento
Sabe
a beso tu mirada
en la boca sin besos
Se oye
tu mirada
pasos sobre las hojas
de la sombra de un deseo
Se siente
tu mirada
¡La siento!
Blog de poesía y aproximaciones. Todo es posible en el territorio del asombro. Balbuceos de criatura encomillada por infinitos desde su soledad compartida.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
Calavera.
Casa que atesora la oquedad dejada por el único que la habitó y tuvo en ella la irrepetible cita con el unive...
-
Casa que atesora la oquedad dejada por el único que la habitó y tuvo en ella la irrepetible cita con el unive...
1 comentario:
Los poemas siempre son, de alguna manera, poemas de amor. No importa que hablen del propio poeta, del odio o de un asunto triste. Pero los hay que son más de amor que otros, y entonces les llamamos explícitamente "poemas de amor". Este "Huele a tristeza tu mirada", en cambio, se mueve en un curioso e innominado terreno fronterizo. Sin dudas, el más fértil para la poesía.
Publicar un comentario