sábado, 18 de junio de 2016

Misterio de una sonrisa.

    Un misterio sutil recorre el tiempo que dura la sonrisa de la Gioconda esa contracción enigmática que no se esfuma y sin embargo es la manifestación fugaz de un hecho interior sujeto a la masacre temporal y al despliegue que va de la seriedad a la seriedad más allá de las técnicas del genial Leonardo y su capacidad de atrapar el instante algo que nunca sabremos o solo podremos intuir cuando nuestro propio rostro en consonancia con torbellinos internos dé paso a una mueca sutil que pueda parecer  una aberración que busca la complicidad de la noche o una sonrisa.
                                                                  

1 comentario:

Abel German dijo...

Un gran texto. Muy hermoso. Ese misterio, sí, está más allá de la técnica del genio, incluso, como bien sugieres, en nuestro propio rostro. Sólo hay que mirar. Y mirarnos.

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