lunes, 2 de septiembre de 2013

El cálculo.


    Este amanecer hay un delicado cálculo de pájaros. Una enumeración paciente de trinos en la presunción de la hojarasca. Es la consecuencia de una llovizna al margen de los pronósticos. Mediante la música, una insinuación de deseo a través de una garganta y cuerdas acariciadas por arcos de piel, arcos dedos lascivos, huellas de la noche. Es un cálculo con inexactitudes, con mucho de ayer en el cielo nublado. Un modo de olvidar falseando la memoria.

3 comentarios:

Guillermo Iglesias dijo...

Es un texto maravilloso, tan pegado a la verdad y tan hermoso.
Gracias, Andrés
Un fuerte abrazo, amigo.

Anónimo dijo...

Andrés: expresas un momento (una emoción) que es pura poesía, sin que ello te llevase a escribir "poesía pura". La sensación que trasmites es real y el cómo la describes no tiene trucos. Eso lo agradece el poema y quienes lo leemos.

Un abrazo.

Abel German

Ceciely dijo...

De presagios y pronósticos los pájaros…
De la noche y los deseos, ella…quien con inexactitudes falseó la verdad.
Un gusto venir a visitarte, querido amigo. He regresado y estoy poniéndome al día en las lecturas. Gracias por tu último comentario en "Dulcineas"
Abrazo y feliz fin de semana.

Calavera.

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